MMM...CADÁVERES!
¿Cuántas veces (si sos tan ñoño como muchos de nosotros), como solución improvisada ante intolerable aburrimiento en una reunión con amigos, propusiste aquel juego en el que cada uno debía escribir una línea pero sin poder ver totalmente lo antes escrito por el resto? Muchas, de seguro. Fueron los surrealistas los que, a principios del siglo pasado, reinventaron (basándose en un antiguo juego de mesa) esta suerte de obra colectiva y, por supuesto, lúdica a la que denominaron CADÁVER EXQUISITO. Cuentan que recibió este
nombre porque la primera frase del juego piloto fue Le cadavre exquis boira le vin nouveau (el cadáver exquisito beberá el vino nuevo). Paul Eluard, André Bretón y Tristán Tzara fueron algunos de sus precursores e intentaron buscar con esta invención que el azar, lo intuitivo, lo espontáneo y lo inconsciente quedara plasmado, dando lugar a una creación imposible de concebir de manera individual.
A la expectativa de recibir otros mucho más ingeniosos, colocamos en comentarios un ejemplo de esta técnica...